viernes, noviembre 05, 2004

Cuarto poema

Celos

Hoy conocí los celos, los verdaderos celos, es extraño; una persona como yo, que juega a no dudar, envuelta en vanidad, a quien le encanta soñar con ser dios: sentí celos.

Enloquecí poco a poco hasta llegar a odiar a una fantasma que sé derrotado. Te odié a ti por recordarlo, por extrañarlo, por haberlo pensado mientras estabas en mis brazos. Desgarré mis sábanas mientras les reprochaba por nunca haber acariciado tu piel. Desee arrancarme ojos y manos por no conocer de memoria cada rincón de tu cuerpo. Me reclamé a gritos no ser aquel al que dirijas tu poesía, sí, ese que maldecías en cada verso: ¡cómo lo envidié! Maldije a Cervantes y a su Quijote por haber servido como cómplices a esa historia. Desbordé mi rabia contra mis cajones por no estar repletos de fotografías y recuerdos.

¡Carajo! ¡Cómo odié tu cuerpo! Lo odié por extrañar otro tacto, quise arrancarte la piel por la rabia de saberla previamente amada y me escupí, me maldije, deseé arrebatarme la vida, aniquilarme por el simple hecho de no tener lunares que sólo tú conozcas ni ser capaz de intrigarte con una palabra que quedara como herencia el día de mi partida.

Por una noche me perdí en el rencor, embriagué a la razón y la dejé dormir, me entregué a un sin fin de palabras que algún simplista llamó celos

1 Comments:

Blogger Yy said...

Pues, aunque me constó algo de trabajo leer el texto en azul ¬¬ me gustaron mucho tus letras.

Gracias por visitar mi blog, y seguiré por aquí :)

2:26 p.m.  

Publicar un comentario

<< Home


Click Here
Powered by TagBoard Message Board
Name

URL or Email

Messages(smilies)

moon phases